La Dirección General de Tráfico (DGT) ha advertido recientemente que más de un millón de coches circula con defectos graves en sus neumáticos. Y que, además, uno de cada cinco, no pasa la Inspección Técnica de Vehículos. Por todo ello, la DGT ha puesto en marcha recientemente una campaña para revisar los neumáticos de los coches que circulan por nuestras carreteras.
Los controles, que se llevarán a cabo durante todo el verano, serán llevados a cabo por la Guardia Civil y los policías locales y autonómicos a fin de poner en sobre aviso a los conductores del peligro que supone conducir con un neumático gastado. Un peligro que se hace extensivo a todos los usuarios de la vía pública.
El neumático es el único punto de contacto con la carretera y su estado de conservación es crucial para reaccionar frente a cualquier eventualidad en la vía pública. De ahí la importancia de mantener en perfecto estado sus características de conservación. Y es que según los datos de la DGT y durante 2016, la antigüedad media de los vehículos en los que viajaban víctimas mortales de accidentes en carretera fue de 12 años el turismo, 9 el de la motocicleta y de 13 años el de los camiones.
“El riesgo de fallecimiento es 1,63 veces superior en aquellos de 10 a 14 años y 2,2 veces superior en los de 15 a 19 años”, apuntan fuentes de la Dirección General de Tráfico. Una de las deficiencias más comunes que podemos encontrarnos en los neumáticos es la de la banda de rodadura casi inexistente y que es inferior al mínimo legal de 1,6 milímetros.
Sin embargo, la campaña que impulsa Tráfico no solo se centra en el buen estado de los neumáticos sino que se hace extensivo a otros elementos de seguridad como los frenos, luces o señalización. Tráfico recuerda que para prevenir su desgaste, las lámparas deben cambiarse cada 40.000 kilómetros.