Desde el carrito de un bebé a la urna funeraria de un difunto, pasando por una escalera de pintor, un rollo de césped artificial o una motocicleta, el fondo del mar se ha convertido en un gran vertedero donde uno puede encontrar de todo.
Bien lo saben los buceadores de la Red de Vigilantes Marinos de la ONG Oceánidas que desde hace cinco años vienen organizando campañas nacionales de limpieza en ecosistemas acuáticos para luchar contra el grave problema de las basuras marinas en nuestro país. “Los residuos sólidos son enemigos sigilosos que llegan a los mares y los océanos sin hacer ruido, ocasionando la muerte de más de un millón de aves y cien mil tortugas y mamíferos anualmente”, aseguran los responsables de esta red de voluntariado que ya cuenta con más de 1.000 submarinistas dados de alta.
La última gran campaña para la limpieza de fondos marinos se ha realizado a principios de junio, con el despliegue de un amplio dispositivo en más de 30 puntos del litoral español en el que han participado miembros de la Red de Vigilantes Marinos, voluntarios del Proyecto Libera, liderado por SEO/Birdlife y Ecoembes, y un buen número de empresas y organizaciones colaboradoras entre las que se encuentra SIGNUS. El resultado es la retirada de más 11 toneladas de basura sacadas de las profundidades marinas, entre las que destacan plásticos, envases de metal y cristal, neumáticos y enseres de pesca abandonados.
Pescadores de neumáticos
Los neumáticos acaparan un especial protagonismo en estas actuaciones de limpieza de costas.
Suponen una parte importante del peso de los residuos que se extraen de los fondos marítimos, procedentes de los barcos de pesca y de otras embarcaciones que los utilizan como defensa en los atraques de los puertos para terminar abandonados en el mar. “No sabemos muy bien cuáles son las consecuencias de que haya tantos neumáticos en las profundidades de nuestros mares, pero como norma general debemos tener en cuenta que todo lo que no pertenece al medio es mejor que no esté”, asegura Estibaliz López-Samaniego, directora de proyectos de la Asociación ‘Vertidos Cero‘.
En la campaña del primer fin de semana de junio se retiraron del mar un total de 134 neumáticos, según refleja la aplicación móvil MARNOBA; una plataforma que recopila, almacena y muestra información sobre las basuras marinas de las costas españolas, desarrollada por la Asociación Vertidos Cero con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica (MITECO). De esta forma, se consigue información que permite adquirir un mayor conocimiento de la tipología de residuos que aparecen en el medio marino, sobre su origen y vías preferentes de transporte y deposición.
“Lo que está claro –continua diciendo Estibaliz López-Samaniego– es que los neumáticos están ocupando un lugar que no les corresponde. La puesta de muchas especies está ligada a los fondos marinos y si alteramos estos ecosistemas alteraremos también la capacidad reproductora de los peces”.
De hecho, los buceadores de la Red de Vigilantes Marinos se encuentran en ocasiones con neumáticos colonizados, que ya han creado un ecosistema natural a su alrededor y, por lo tanto, no se aconseja tocarlos - comparte . “A veces es peor el remedio que la enfermedad. Si existe biótica es mejor dejar los neumáticos donde están”, concluye directora de proyectos de la Asociación ‘Vertidos Cero’.
Comprometidos con el cuidado del mar
El proceso de la regida de neumáticos comienza con la localización del residuo, por lo general, en las inmediaciones de un muelle o de un puerto pesquero. La Red de Vigilantes informa entonces del hallazgo y comienza una operativa para su extracción que puede requerir, dependiendo del caso, de permisos especiales o la intervención de la Guardia Civil. Una vez fuera del agua, el neumático se clasifica y se gestiona a través del ayuntamiento o las autoridades locales.
“El problema es que no siempre se dispone de los medios necesario para gestionar los residuos neumáticos de la manera más adecuada”, comenta Isabel López-Rivadulla, directora de Comunicación de SIGNUS. El sistema de gestión de neumáticos fuera de uso se ha incorporado, junto a la Comisión de Fabricantes, como colaborador a la Red de Vigilantes Marinos, para ocuparse de la retirada y gestión de los neumáticos en lugares de difícil acceso o donde los ayuntamientos no puedan hacerse cargo.
“Este es un primer paso en nuestro compromiso con el cuidado del mar. Nuestra intención es seguir trabajando con la Red de Vigilantes Marinos y ampliar la colaboración a más sitios”, confirma con entusiasmo la directora de Comunicación de SIGNUS.
La Red de Voluntarios Marinos
La Red de Voluntarios Marinos es una iniciativa de la ONG Oceánidas compuesta mayoritariamente por submarinistas que, de forma voluntaria, se involucran en la conservación de las especies ligadas al mar a través de labores de protección, investigación y divulgación del medio marino. Viene realizando limpieza de fondos desde prácticamente su nacimiento, hace unos cinco años. En la IV Gran Limpieza de Nacional de Fondos Marinos, que se desarrolló el pasado mes de octubre en 42 puntos del litoral español, se extrajeron de los ecosistemas subacuáticos 17 toneladas de residuos, gracias a la participación de dos mil voluntarios. En octubre de este año, volverá a organizarse la Gran Limpieza.