Purificadores de aire ¿Sirven de algo contra el coronavirus?

Existe una palabra fatídica en este nuevo ecosistema que nos ha traído la pandemia del coronavirus: aerosoles. Se supone que son la vía de contagio aérea más eficaz para el bicho y más mortífera para nosotros. Esas gotitas respiratorias infectadas que involuntariamente lanzamos a los cuatro vientos mientras hablamos, cantamos o tosemos nos traen a maltraer. Cuanta menos ventilación hay en los espacios cerrados, más gente nos juntamos y más chillamos, más peligro tenemos de darnos de bruces con el volátil virus. Pero cualquiera deja estos días heladores las ventanas abiertas. Así que mucha gente intenta curarse en salud apostando por los famosos purificadores de aire con filtros HEPA, algunos ofertados en internet como la panacea tanto para casas como para restaurantes y colegios.

¿Pero de verdad funcionan?

El Ministerio de Sanidad lo ha dejado muy claro. El uso de filtros por sí solo no garantiza una calidad de aire adecuada, especialmente cuando la ventilación es insuficiente. En ciertas situaciones pueden ser eficaces, pero bajo ningún concepto podemos considerarlos mágicos talismanes salvadores, maquinitas milagrosas que con apretar el botón de encendido nos librarán de todos los males.

Según los expertos, antes de gastarnos el dinero en artefactos poco útiles, estos son los cinco aspectos fundamentales a tener en cuenta:

1. ¿A quién queremos proteger? Si lo ponemos en casa y uno de nosotros está enfermo no habrá filtro que evite el contagio.
2. Tamaño de los espacios a filtrar. No es lo mismo una pequeña habitación que una casa entera, una oficina o una cafetería.
3. Efectividad contrastada. Debe cumplir la norma UNE1822. Las recomendaciones en Amazon o de un supuesto médico con nombre exótico solo nos garantizan la estafa.
4. Ubicación. Es muy importante saber dónde se instala el purificador o sistema de aire acondicionado para evitar que solo limpie una pequeña zona a su alrededor.
5. Mantenimiento. Por buenos que sean los filtros, si no se revisan y limpian periódicamente se convierten en ineficaces.

Luces ultravioletas, generadores de ozono…

¿Y qué pasa con las famosas luces ultravioletas UVC y los generadores de ozono? Pues tampoco son la medalla de la Virgen Milagrosa a precio de AliExpress. Tanto el Ministerio de Sanidad como la OMS rechazan su uso en ámbitos comerciales y familiares. Su empleo combinado solo está recomendado para espacios muy profesionales como laboratorios o quirófanos.

Pues tampoco son la medalla de la Virgen Milagrosa a precio de AliExpress. Tanto el Ministerio de Sanidad como la OMS rechazan su uso en ámbitos comerciales y familiares. Su empleo combinado solo está recomendado para espacios muy profesionales como laboratorios o quirófanos.

¿Y si a pesar de todo decidimos reforzar la limpieza del aire que respiramos? Como recuerda la divulgadora científica Boticaria García, “filtros HEPA sí, pero con asesoramiento profesional, combinándolos con ventilación manual siempre que sea posible y sin descuidar el resto de medidas”.

Vivimos una época en la que lo fiamos todo tanto a la tecnología que ésta nos puede generar una falsa sensación de seguridad, pero al final la realidad es tozuda. Frente a la terrible pandemia del coronavirus la mejor protección sigue siendo la prevención: distanciamiento social, mascarillas y lavado frecuente de manos.

Y el mejor espacio gratuito libre de virus lo seguimos encontrando al aire libre, a ser posible en parques, jardines, zonas rurales y espacios naturales donde, además de su limpieza inigualable, aporta todas las ventajas emocionales y físicas de un agradable paseo.